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El jugador del Sevilla, Antonio López (atrás), anotador del único tanto del partido, fue una sombra constante para el portugués merengue Luis Figo. EFE
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Real Madrid pasa apuro
Clasifica a la final de Copa del Rey con sangre, sudor y lágrimas
Sevilla / AP. El Real Madrid sucumbió ayer 1-0 ante el Sevilla, pero de todas formas logró clasificarse a la final de la Copa del Rey, un título que no gana desde 1993.
El Sevilla, que luchó y se plantó fuerte contra los merengues, madrugó en el marcador a los 38 segundos gracias al gol del volante Antonio López.
El pase del Real se concretó gracias a una cuenta global 2-1, ayudada por la victoria 2-0 en el choque de ida en Madrid.
El otro finalista saldrá del encuentro Zaragoza-Alavés que se disputará hoy. Ambos empataron 1-1 en el juego de ida en Alavés.
Costoso
El conjunto merengue sufrió mucho contra el Sevilla que llegó a asustarles. El panorama se les complicó al quedarse con diez hombres por la expulsión de Zinedine Zidane poco antes del descanso.
El Real sufrió un golpe casi instantáneo cuando López fusiló al arquero merengue, César Sánchez, tras un pase del cañonero uruguayo Darío Silva.
El Sevilla se animó con el gol e intentó marcar otro, ya que estaban obligados a facturar dos tantos para remontar el resultado.
Fue un partido con mucha intensidad y tensión. El estadio Sánchez Pizjuán se llenó, algo que no ocurría desde hacía cinco años, y la hinchada se convirtió en el jugador número doce para el Sevilla.
A los 42 el árbitro le anuló al zaguero brasileño Roberto Carlos un gol por fuera de juego.
El Real, que contó con todas sus estrellas menos con el guardameta Iker Casilla, se quedó con diez a los 44 minutos. El volante francés Zidane vio la tarjeta roja directa por agresión, señalada por propinarle un manotazo en la cara al zaguero Pablo Alfaro.
El francés se perderá, por esta expulsión, la final que se disputará en Barcelona el 17 de marzo.
A los 54 el Sevilla también se quedó con diez debido a que el defensa Javi Navarro acumuló su segunda amarilla.
El astro brasileño Ronaldo estuvo a punto de marcar a los 56 minutos, tras una jugada personal, pero la gran intervención del arquero Esteban Suárez evitó el gol.
La intensidad de juego sevillista fue mayor que la del Real, sobre todo en el primer tiempo en el que los merengues tuvieron que trabajar mucho en defensa para evitar el segundo gol del Sevilla.
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